La résponse imprévue, 1933 - René Magritte
De perfil se parece al quicio de una puerta;de espaldas, la silueta recortada
en la puerta de un cuadro de Magritte.
Desde mi perspectiva es eso último,
un agujero oscuro esperando la noche
para obtener la consistencia de las sombras,
un agujero que se traga
a la niña de encajes cuando se apoya en él.
A cada inclinación desaparece
alguna parte suya:
su cabeza o un hombro,
la mitad de su espalda,
sus nalgas con bolsillos de vaquero,
y a veces toda ella desaparece o se bifurca
entre el aquí y el más adentro.
Y ese vaivén la desconcierta
–no está entrenada, y se le nota;
nadie le ha enseñado que
ser o no ser no es la cuestión,
la cuestión es saber deslizarse sin miedo
entre las superficies–;
no está entrenada y por eso
aprovecha cualquier cosa que ocurra
para poner a prueba la solidez del mundo.
Y cuando se refugia entre los brazos de él
y murmura "¡qué horror!", lo hace
tanteando el umbral de la nada,
esa densa silueta recortada
en la puerta del cuadro de Magritte.
Y por eso, también, ahora siente este deseo
tan acuciante, tan intenso
de amarle sin demora.
Porque Platón, de acuerdo a su época,
.....las envilece, contestó.
En el mundo de las verdades, ella es la víctima.
Chantal Maillard
De: Matar a Platón, Tusquets Editores, 2004 Barcelona
a media voz: chantal maillard
albalpha: chantal maillard
moma: rené magritte
fabritius: magritte